Servicios Copywriting

Vale. Te has venido arriba. ¿Quién no clicaría un botón dónde se incite a matar? Sólo un psicópata no lo haría.

Pero veo que aún no tienes la hoja de tu cuchillo afilada, empresario inconformista. Voy a sacar la piedra para limar la hoja. Tan fina que pueda rasgar un papel al vuelo. Y para eso voy a empezar por el principio. Contarte cómo escribo mis servicios copywriting. Contarte qué es el brander copywriter. 

Y sí, hablo de brander porque nuestro objetivo número uno, el tuyo y el mío, cuando seamos un equipo, será VENDER.

Y lo haremos con branding. Poniendo a tu cliente en el centro de la escena. Bajo el foco. Ayudándole a solucionar sus problemas. A vencer aquello que le acojona. A conseguir lo que desea. Lo que sueña. Lo que envidia.

Por eso es brander copywriting. Ni ninja, ni samurái, ni hulla-hop, ni fashion. Ni copywriting a secas.

Porque venderás haciendo branding. No branding metafísico. Ni golosineo visual. Ni poesía oracular. Branding del que crea mierda de la buena: mensajes sencillos y relevantes.

Escritos con redacción persuasiva. Y ahí entra el copywriting. Hacemos marca para vender. Vendemos haciendo marca. Vendemos porque nos curramos la marca y desarrollamos marca porque vendemos. Branding más copywriting es Brander Copywriting.

La flecha de Guillermo Tell clavándose en la manzana sobre la cabeza de tu ser querido.

Tan sencillos y relevantes que se puedan repetir una y otra vez, como una reacción nuclear en cadena, atómica. BOOOOOM ¿Oyes cómo suena? Como si la tierra se abriera en dos.

Ahora sí vas a dejar tu marca en la mente colectiva de tus compradores potenciales. Ese sí es nuestro branding. Del que vende. Del que vende con copywriting. Con el Brander Copywriting que encontrarás en mi servicios copywriting, claro.

Los demás tienen copywriting. Tú tienes Brander Copywriting. Esa es tu arma. Tu cuchillo.

Sí. Eres tú.

Y conocer a tu enemigo público número uno es el primer paso para vencerlo.

Y sus aliados son: tu marketing verborreico, tu personalidad múltiple, tu sonrisa Profidén de vende-motos, tus monólogos del club de la comedia.

Pero no se oyen risas. El silencio duele. Tus comeduras de olla a horas intempestivas. Tu toc-toc-soy-yo-otra-vez. Tu email diario de martillo pilón que mandas por mandar, para que lean tu nombre en el asunto de correo y poco más. Ah, ¿eso ya es mucho?, créeme que no. Tu publicidad de crecepelo que lo mismo susurra, que grita, que canta, que te baila break-dance o un pasodoble. Karaoke copywriting. Es lo que no encontrarás en mi servicios copywriting.

Como si le echaras el brazo por encima a alguien que te quiere dar esquinazo. Y le coges del brazo porque quieres explicarle algo que no te ha preguntado. Como el borracho en la penumbra de la discoteca. Más pesao que el cuñao de Rocky.

Pero a tu enemigo público número uno le podemos vencer. Luego vendrán el dos y el tres. Aunque eso ya es otra historia.

Y le vamos a vencer juntos. Siéntate conmigo. Les ofreceremos eso que tú tienes y les solucionaremos el problema al que se enfrentan. UNA solución a UN problema. Sencillo. Directo. Claro.

Un lead será tu cliente cuando lo que oiga es lo mismo que lo que le dices. Y para que oigan lo mismo que lo que le dices, tienes que decirles una sola maldita cosa. Que tienes la solución para su problema.

Y ahora sí. Esto no acaba aquí. Ahora hay que ir a por el enemigo número dos. Tus competidores.

Sigues dudando. Vuelve a leer el titular, tío. Ese consejo bien vale para que un boxeador comprado ponga su culo en la lona en el cuarto asalto o bien vale para ti.

Para que te apartes. Deja de ser el protagonista de tu marca. No te molestes en hacer números. Mejor que no los hagas. Por tu salud mental y la capa de ozono. Por la paz mundial. Las ventas que has perdido por no dejar a tu cliente ser el protagonista de tu copywriting son incalculables. Por chupa-cámara. Cuando no toca. Nunca toca.

El único protagonista aquí es tu cliente. Sus problemas a resolver. Lo que le quita el sueño. Y decirle cómo vas a ayudarle a resolverlo con tu producto o servicio. Cómo vas a hacer que vuelva a dormir como un bebé.

Échate a un lado. ¿Sientes esa punzada? Es tu puto orgullo que vuelve para joderte. Noquéalo. Que muerda la lona. Pon a tu cliente en el centro de tu branding. Que sea el protagonista absoluto de tu historia. Vence a tu enemigo público número uno y ahora si podrás encargarte de darles a tus competidores su merecido con mis servicios copywriting.

Uno, uno, uno-dos. Vas a golpear a tus competidores. Les vas a golpear porque lo van a sentir. Estas ventas que quieres las tienen ellos. No van a caer del cielo. Tu trozo de pastel se lo están comiendo ellos. Y tienes hambre. Tenemos hambre.

Son nuestras ventas. Tuyas. Ahora que tu enemigo público descansa en la habitación del sueño, noqueado. Ahora que tu cliente es aupado en brazos por una multitud enloquecida, mientras los focos los deslumbran, las cámaras se los comen y todos los ojos del mundo están puestos sobre ellos.

Ahora es el momento.

Segundos fuera.